Salida de 57,22Km
Tiempo Real de Pedaleo 3h 16min 08seg
Tiempo Total de la Salida 8h 59min 03seg
Velocidad Media 17,50Km/h
Velocidad Máxima 44,60Km/h
FC Media (Mosquito) 133ppm
FC Máxima (Mosquito) 172ppm
FC Zona 1 (89-105ppm) 8%
FC Zona 2 (106-123 ppm) 34%
FC Zona 3 (124-141 ppm) 28%
FC Zona 4 (142-158 ppm) 21%
FC Zona 5 (159-177 ppm) 10%
Calorías (Mosquito) 2.065Kcal
Desnivel Positivo Acumulado 764m
IBP 40 BYC
Ruta Olesa-Abrera-Martorell-San Sadurni-Martorell-Abrera-Olesa...
Paradas para reagruparnos, para almorzar, para atender percances, para tomar algo y para despedirnos...
Valientes guerreros Pirri, Hyper Jonhy, Mopu, Black Elk, Jaime Modul, Carles Gual, Santi Alarcón y Mosquito...
Hoy nos hemos reencontrado una vez más, y ya van unas cuantas, la élite de los Martorell Bikes y el Élite de Plato Pequeño...
Hemos compartido una magnífica ruta llena de anécdotas que deberemos llevar a la tumba, siempre que no decidan pagarnos por ellas...
La mañana era gélida, e Hyper Jonhy, el legendario biker y Chamán de estos parajes, lo notó rápido en sus finos deditos, que comenzaron a cangrenarse muy pronto...
La ruta discurría sin altercados, sin enemigos al acecho con intenciones belicosas, y eso es de agradecer, aunque un poco de sangre en el combate nunca está de más...
Llegados a la Posada de Canals i Domingo, nos tenían preparada la mejor sala disponible del local, todo lujo, todo servilismo...
Se notaba la importancia del evento. Una veintena de bellas posaderas estaban sólo por nosotros, sin quitar ojo de encima de nuestra mesa, velando porque nunca nos faltase ningún ágape que llevarnos a la boca o ningún brebaje con el que mojar nuestros gaznates...
Las risas, los negocios, los pactos se sucedían uno tras otro...
Sin duda una jornada prometedora para ampliar los tratados entre nuestros pueblos...
De regreso a nuestros castillos, parada rápida en un bar de carretera a tomar el último licor juntos...
Las botellas de su mejor añada iban cayendo como moscas en verano...
El primero en llegar al lugar de partida, no podía ser otro que el Rey de Esparta...
Los comensales dispuestos en la mesa estaban, a darse un gran festín...
Pronto los ágapes comenzaron a llegar en ondanadas de platos que hacían nuestras delicias...
También los licores nos caían del cielo casi sin pedirlos...
La destreza de las gentes de Martorell Bike para tratar con dulzura a las botellas, es de sobra conocida del uno al otro confín, y para muestra un botón...
Mientras tanto a algunos se nos quedaba esta cara viendo como esta tropa de indígenas dominan a las botellas, da igual de que tamaño o licor sean...
De regreso a nuestros Castillos, algunas cámaras de periódicos locales, captaron nuestro paso fugaz...
Y la última parada para hacer un piscolabis antes del adiós...
La ruta y el perfil...
