Es un día caluroso en Esparta, uno más.
Mi servil compañero de campañas bélicas está ausente, batalló en el frente norte bien temprano.
Así que me tocaba sacudir el estoque a solas bajo el incesante sol de mediodía.
Salgo solo, y viendo el calor del día, me veo obligado a cabalgar con paso tranquilo.
No se puede acelerar las pulsaciones en días como hoy.
Así que cabalgo sobre mi corcel con paso firme pero tranquilo.
Poco a poco voy sumando kilómetros y desnivel.
El camino lo marco paso a paso, sin rumbo concreto.
Accedo hasta el parquing de Can Massana sin muchas complicaciones.
Se nota que mi ritmo ha sido contenido y no me ha pasado factura.
Al final, sale una excelente ruta.
1 Reacciones:
Ruta maja.
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