Se hace extraño pensar que el Rey de un pueblo tan grande y próspero como Esparta, esté tanto tiempo consecutivo alejado del Ruedo.
Pero así ha sido y así lo hemos contado.
Tras coger un pequeño resfriado entre el domingo y el lunes, Mosquito dedicó todo su esfuerzo y energías a combatirlo desde el minuto uno.
Así que dejó pasar días importantes del calendario Espartano como los martes, los jueves e incluso los domingos.
No salió a patrullar ninguno de estos días porque se encontraba inmerso en una lucha interna contra los virus que le acechaban.
Y consiguió salir indemne y con mínimas secuelas de semejante batalla.
Unos pocos mocos y un par de malas noches fue el precio a pagar.
Por fin, hoy, junto a su compañero de batallas, 9 días después de su última patrulla, ha podido volver a sentir la sangre corriendo por el filo de su espada.
Por fin hoy, ha conseguido sentir de nuevo su corazón saliendo por la boca.
Por fin hoy, ha notado sus pulmones como se exprimían en zonas duras.
Sin duda, retomar las viejas costumbres siempre es síntoma de buena salud.
La ruta y el perfil...
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Por fin.
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