domingo, 1 de noviembre de 2020

UNA VUELTA A VILADECABALLS CON SORPRESA...



DATOS TÉCNICOS SALIDA

Salida de 41,88Km
Tiempo Real de Pedaleo 3h 27min 30seg
Tiempo Total de la Salida  4h 49min 31seg
Velocidad Media 12,70Km/h
Velocidad Máxima 49,80Km/h
Desnivel Positivo Acumulado 1.053m
IBP 98 BYC
Ruta Olesa-rio-Oasis-Riera de Gaià-Ullastrell-Les Bases Negres-Viladecavalls-Pedra Degollada-Can Boixeres-La Galla-El Samuntà-Bosc de Can Marcet-Serra de Deu-Ribes Blaves-Vicentó 2-Olesa
Paradas para replegarnos, tomar geles y barritas, hablar con los Plato Grande, analizar el camino a tomar, tomar unas cervecitas y despedirnos...
Valientes guerreros  Vicente y Mosquito...


Rutaca dura a la vez que chula.


Todo comenzó girado.


Mosquito llevaba el freno trasero con burbujas de aire, lo que le condicionó toda la jornada.


Se olvidó de grabar la ruta desde su castillo, poniéndolo a grabar cuando ya llevaban unos 9 kilómetros y unos 300 metros de desnivel.


Llegando a Oasis por las rampas desde el Río Llobregat, a la altura de la depuradora, cogemos a un grupo de Plato Grandes electrificados que escoltaban a Joan Roda.


Arriba les esperaban el resto de la trupe.


Aquí charlamos un rato, cerramos pactos, pero acto seguido nos separamos.


Al rato, el camino que teníamos que tomar, se hallaba cortado por una valla nueva que ha nacido e impide el paso.


Primer gran escollo.


Nos liamos a buscar como locos, alternativas que conduzcan al mismo punto, pero sin alejarnos mucho.


Al final, damos por imposible localizar un punto de conexión en ese punto.


Bajamos a la riera por otro punto, casi en Santa María de Villalba.


Pero ERROR, en el punto en que se juntan 2 rieras, hemos optado por la errónea.


Hemos surcado la Riera de Gaià en dirección a Ullastrell.


Cuando deberíamos haber tomado la riera de Sant Jaume a mano izquierda.


El caso es que buscábamos un ascenso de la Riera de Gaià que no llegaba, hasta hacerlo en Ullastrell, algo alejados de nuestra ruta original.


Pero no hemos desfallecido, hemos seguido mirando el mapa, mirando las señales hasta, por fin, enganchar el track inicial.


Al final, recompensa en el Castillo de Vicente en forma de cervecitas y frutos secos.


Y otra para la saca.



En este punto ya habíamos dado con el track, tras muchas penurias...
 
 
Sorpresas te da la vida. Este reptil, querái formar parte de este inolvidable día...
 
 
El intrépido Vicente, que no le tiene miedo a nada, la doma a los 30 segundos de mirarla fíjamente a los ojos...
 
 
La serpiente se deja querer en brazos de Vicente
 
 
Su tranquilidad no tardaría en llegar...
 
 
Con su lengua viperina fuera, estudia nuestro miedo interior...
 

 
 
La ruta y el perfil…